Aquí os traigo una nueva reseña pero esta vez como el propio nombre de la sección indica es la reseña de un relato corto. Es una obra de Olga Salar. Espero que os guste.
Sinópsis.
Lis ha conocido a Matt en la clase de cocina a la que se ha apuntado con la intención de ser capaz de cocinar algo comestible. Él es guapo, inteligente y domina las artes culinarias... A pesar de ello, no es lo suficientemente perfecto como para que Lis no le encuentre alguna carencia, real o inventada, que le permita justificar su reticencia hacia él. Ya que ella no está interesada en romances apasionados con hombres atractivos y educados, ¡JA! Al menos eso es lo que Lis insiste en repetirse con muy poco éxito.
La autora.
Nació un veintidós de enero en Valencia. Quizás fue por eso de nacer en puro invierno, que adora el frío y no soporta el calor
Desde bien pequeñita le apasiona la literatura, tanto es así, que al llegar a la universidad se enroló en la carrera en la que había más lecturas obligatorias, y terminó licenciándose en filología hispánica con mención en filología catalana.
Lo de cuentista es algo que nació con ella, pero que está segura que se acentuó cuando se convirtió en mamá.
En diciembre de 2009 creó el blog literario Luna Lunera (Diario de una Lunática) y gracias a él, es conocida en la red como Olga Lunera.
Es autora de la bilogía juvenil Lazos Inmortales y de la novela romántica Un amor inesperado.
Crítica.
Que puedo decir de este relato, a parte de que es maravilloso. Es el comienzo de su historia publicada "Un amor inesperado", un libro que aún no he leído pero que tengo pendiente.
Lis es una chica muy orgullosa, que no admite que está enamorada pero solo hay que ver la forma en la que Olga describe en como mira a Matt, cuando habla con otras chicas o cuando esta espera que Matt entre por la puerta del curso de cocina. Es un relato muy divertido con su punto sexy que te hará pasar un rato agradable y a la vez te hará sentir la necesidad de salir corriendo a la librería en busca de una continuación.
Y mi pregunta es ¿Cómo se pude decir tan poco en tan pocas páginas? Esa es la pregunta que me he hecho yo al terminar el relato. Solo son 23 páginas, pero están llenas de sentimientos y emoción. Es complicado y lo digo por propia experiencia, llegar a emocionar al autor, a crearle sentimientos y emociones que tu sientes cuando escribes y sabes que la sienten los personajes pero que tu con tus palabras tienes que explicarlo para que otros también los sientan. Por ese motivo alabo la habilidad de esta escritora por conseguirlo en tan poco espacio como son poco más de veinte páginas.
Tiene momentos muy divertidos, que te sacan una sonrisa de forma irremediable. Si la continuación de este relato hecho libro es tan buena, será una historia maravillosa.
Mi puntuación.
0 comentarios:
Publicar un comentario